Por más a frase de cliché que suene, no hay premisa más cierta que esta que dijo Bill Gates hace algunos años: “Si tu negocio no está en internet, tu negocio no existe”. Y vaya que tenía razón.
Te has puesto a pensar que años atrás, quizá cuando apenas estaba iniciando la internet, las personas buscábamos soluciones a nuestras necesidades en las conocidas y ya muy olvidadas ‘páginas amarillas’, esta era la fuente para encontrar productos, bienes o servicios y al igual que hoy en día los consumidores comparábamos con aquellos que nos dieran más confianza y tuvieran una buena reputación.
Ahora bien, el marketing digital cada vez es más fuerte y está ayudando a que las empresas tengan mayor visibilidad y se conviertan en una opción dentro de los diferentes nichos mercados.
Construir un ecosistema digital que esté alineado al mismo ecosistema físico de una compañía o marca no es algo tan complejo, pero sí es algo a lo que hay que dedicar tiempo para comprender las características y particularidades a las cuales te debes alinear para que tu web funcione.
Más allá que tengas una base sólida de clientes o que el mayor número de ventas provengan del voz a voz y la excelente calidad y satisfacción de necesidad que ofreces como marca, son los consumidores quienes marcan la pauta en el mundo digital, ya que son ellos los que constantemente realizan búsquedas, comparaciones, dejan sus datos para una retroalimentación y hacen compras.
Además de crear un nuevo canal de venta, también estás fortaleciendo el vínculo entre el consumidor y la oferta, ya que al hacer presencia digital y lograr posicionarte dentro de los motores de búsqueda como Google, hacen que tu empresa supla esa necesidad que existe para establecer relaciones consumidor-marca.
En ese sentido, los consumidores quieren respuestas directas, efectivas y una atención personalizada donde la venta directa no parezca la gran intención de la compañía. Es allí donde los contenidos juegan un rol característico para destacarse frente a la competencia, eso sí, si llegas a “vender humo” o no cumples con tu promesa de oferta la condena digital hará que tu reputación baje, ya que se pierde la confianza que los navegadores y clientes depositaron en ti.
Ahora, si bien te debes preocupar por existir, tener una buena reputación y buen posicionamiento articulado con contenido de calidad dentro del ecosistema digital, lo más recomendable es no gastar tus esfuerzos o recursos en buscar a los consumidores, clientes o conversiones. Ellos deben llegar a ti porque son quienes tienen las necesidades y tú las soluciones a ellas.
Dicho esto, allí es donde toma sentido la premisa expuesta por Gates, pues entendiendo que sí dentro del abanico de posibilidades no te encuentran, no existes en un plano digital, pero eso repercute también en el tangente, pues la percepción de no tener presencia en la web te condena a no existir.
Por esto, es que en Tres Mitades nos enfocamos directamente en la presencia digital y en el posicionamiento de tu marca en los motores de búsqueda cómo Google, desarrollando estrategias para que tu reputación y reconocimiento sea clave en internet.
Por más a frase de cliché que suene, no hay premisa más cierta que esta que dijo Bill Gates hace algunos años: “Si tu negocio no está en internet, tu negocio no existe”. Y vaya que tenía razón.